Conversión
 
								
				
				Un roce accidental bastó, una mirada tímida, una sonrisa sincera. Él se convirtió aquel día. Dos de diciembre de mil novecientos noventa y cinco.
 
       
		
		
	 
								
				
				Un roce accidental bastó, una mirada tímida, una sonrisa sincera. Él se convirtió aquel día. Dos de diciembre de mil novecientos noventa y cinco.
0 comentarios